Hace un par de años durante una de las clases del tan querido y divertido profesor Julián García, comentábamos entre los alumnos ciertas actitudes y actividades que teníamos para cuidar nuestro medio ambiente, y dentro de esas sugerencias el profe expuso su idea de ahorrar agua al hacer del baño no de la forma regular en el inodoro sino aprovechar cada vez que entráramos a la ducha y orinar en ese momento, así ahorraríamos una descarga de agua más del retrete; y es que en verdad la cantidad de líquido que liberamos en nuestra orina no es tanta como para necesitar los 12 litros promedio que corren por cada descarga que hacemos del inodoro. En aquel momento nadie admitió el hacerlo, tal vez por pena, pero de lo que trata esta entrada es de una campaña que incentiva este mismo tema y de por qué sería bueno que todos lo llevemos a cabo.
Creo que lo más convincente en este mundo o son las mujeres con sus encantos o los niños con esa ternura e inocencia, y en este caso son voces de niños quienes invitan a la gente a hacer "xixi no banho". Algunas semanas atrás, en Brasil empezó una campaña promovida por SOS Mata Atlântica, una organización privada sin fines de lucro que lucha por la protección de la Mata Atlántica, un ecosistema de los más ricos por su biodiversidad pero también considerada una de las amenazadas por peligro de extinción en el planeta. La realización de esta campaña corrió a cargo de una de las agencias más afamadas de la región, F/Nazca Saatchi & Saatchi Brasil.
La página oficial de la campaña está disponible sólo en portugués pero vale la pena echar un ojo. Y lo que tampoco está en español pero sí con subtítulos en inglés, es el siguiente vídeo que es el que ha dado vueltas y vueltas por todos lados, pero créanme que las imágenes hablan por sí solas.
A través de esta campaña, se anima a los ciudadanos a hacer pis en la ducha y ahorrar hasta 4,380 litros de agua anuales por cada hogar.
En la Ciudad de México por ejemplo, a principios de los años 90 se exigió que todos los nuevos inodoros instalados no debían usar más de 6 litros por descarga de agua, en comparación con inodoros corrientes que promediaban 16 litros por descarga; y para 1991 se habían instalado más de 350,000 inodoros con baja descarga de agua, ahorrándose así 28 millones de metros cúbicos de agua por año. (Estos datos los obtuve de un informe del año 1998 que trata muy a fondo la problemática del manejo del agua por parte de las municipalidades, para explorar más click aquí)
Este último párrafo me hizo recordar de una campaña famosa que hubo hace mucho tiempo en México sobre el cuidado del agua, pero lo más triste es su fama se debió a la peculiaridad del niño actor que protagonizaba dicha comunicación y no por el mensaje en sí mismo. (La publicaré aquí tan pronto encuentre la información).
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